Para tareas en la industria, el comercio, la oficina o el hogar, el mercado ofrece una gran variedad de escaleras, que pueden ser de diferentes tipos: escaleras de tijera, escaleras transformables o escaleras de apoyo, entre otras opciones. Sin embargo, a la hora de adquirir una escalera, ¿cuál es la que mejor se adapta al trabajo en altura que se va a realizar? La elección de una u otra escalera es de gran importancia puesto que no solo afectará a la seguridad del profesional o usuario, sino que también repercutirá en la ergonomía o comodidad con la que se desarrolle un determinado trabajo en altura.

La elección inadecuada de una escalera puede limitar el acceso seguro a ciertas áreas o no proporcionar la estabilidad necesaria, lo que puede ocasionar accidentes y caídas en altura. Y es que, factores como la altura insuficiente de la escalera –que obliga al profesional o usuario a estirarse más allá de lo recomendado- o escoger un material inapropiado para el entorno –usar una escalera de aluminio para efectuar trabajos eléctricos- comprometen la seguridad de las personas.

Desde la Asociación de Fabricantes de Escaleras Portátiles (AFESPO) hemos elaborado esta guía para poder escoger la escalera que mejor se adapta a cada trabajo, teniendo en cuenta las necesidades específicas del trabajo, como la altura que se requiere alcanzar, la capacidad de carga o el entorno de trabajo.

Tipos de escaleras y usos específicos

Cada escalera está diseñada para cumplir con una función específica. Por este motivo, para desarrollar un trabajo en altura con la máxima seguridad, estabilidad y ergonomía, es importante saber qué escalera es la más adecuada para la tarea que se vaya a realizar. Los tipos de escaleras más comunes son los siguientes:

• Escaleras de tijera. Este modelo de escalera, uno de los más habituales en entornos profesionales y domésticos, destaca por su facilidad de manejo, estabilidad –proporciona una amplia base que minimiza el riesgo de caídas– y seguridad, siendo muy recomendadas para trabajos que requieren estar de pie durante largos periodos de tiempo como tareas de pintura o mantenimiento de interiores.
• Escaleras telescópicas. Estas escaleras pueden ajustar su longitud según las necesidades del trabajo, lo que las hace muy versátiles. Diseñadas para ser compactas y fáciles de almacenar, este modelo es muy utilizado para trabajar en alturas de trabajo variables y en espacios reducidos –limpieza de canaletas, reparación de sistemas de aire acondicionado, trabajos en garajes o espacios reducidos, etc.-.
• Escaleras con plataforma. Este tipo de escalera cuenta con una plataforma amplia y estable en la parte superior, por lo que son idóneas para trabajos prolongados en altura que requieren una mayor superficie de apoyo, como puede ser la instalación de ventanas, tareas de picking o la construcción de estructuras. Las escaleras con plataforma ofrecen al profesional y al usuario la máxima seguridad, estabilidad y ergonomía.
• Escaleras extensibles. Estas escaleras, muy recomendadas para alcanzar alturas elevadas, son muy versátiles al poder adaptarse a diferentes alturas de trabajo. Este modelo, que se compone de dos o más secciones, es muy utilizado en tareas en el exterior, como la limpieza de canalones o los trabajos en tejados. Sin embargo, requieren apoyo en una superficie estable, como una pared, para garantizar su seguridad.
• Escaleras multifunción. Este modelo, muy utilizado en trabajos tanto en interior como en exterior, ofrece una gran versatilidad al poder usarse en múltiples posiciones: escalera de tijera, escalera de apoyo o plataforma, dependiendo del modelo escogido.
• Escaleras transformables. Este tipo de escalera permite adaptarse a las necesidades de cada tarea y a la altura de cada trabajo. Las escaleras transformables, muy recomendadas para la reparación de techos falsos, el mantenimiento o la reparación de edificios, se caracterizan por su estabilidad y versatilidad, al poder usar en posición de tijera o de apoyo.

Altura de trabajo

A la hora de adquirir una escalera, la altura es uno de los factores más importantes a tener en cuenta. Para poder desarrollar un trabajo en altura con la máxima seguridad y ergonomía, es importante asegurarse de escoger una escalera que sea lo suficientemente alta para evitar posturas incómodas y complicadas que puedan incurrir en daños o desequilibrios, provocando caídas en altura que, en ocasiones, pueden tener graves consecuencias.

Peso

El peso de la escalera es otro aspecto que hay que considerar a la hora de elegir una escalera, sobre todo si se va a trabajar en diferentes ubicaciones o si se necesita acceder a lugares con restricciones de espacio –pasillos estrechos o áreas de trabajo reducidas-.

Una escalera demasiado pesada puede ser incómoda, complicada y peligrosa de desplazar de un espacio a otro mientras que, una escalera excesivamente ligera, puede resultar inestable. Por ello, es importante optar por una escalera con un peso adecuado para la tarea que se vaya a realizar.

Por lo que respecta a la carga total máxima de la escalera, la Norma Europea EN 131 establece que, incluidas las herramientas, no puede sobrepasar los 150 kg. Por ello, para asegurar un trabajo seguro y estable, nunca hay que sobrepasar esta carga.

Material de fabricación

El material con el que está fabricada la escalera influye en su durabilidad, peso y seguridad, por lo que hay que escoger la que mejor se adapte al entorno en el que se va a trabajar y al tipo de trabajo que se va a realizar. Los tipos de escalera, según su material, más comunes son:

•  Escaleras de aluminio. Este modelo se caracteriza por su resistencia a la corrosión, ligereza y facilidad de transporte, por lo que son muy utilizados en trabajos que requieren de mucha movilidad. Además, requieren de poco mantenimiento y son resistentes a los cambios atmosféricos. Sin embargo, no son adecuadas para trabajos eléctricos puesto que son conductoras de la electricidad.
•  Escaleras de fibra de vidrio. Estas escaleras son perfectas para trabajos donde existe un riesgo eléctrico puesto que no son conductoras de la electricidad. Aunque son más pesadas que las escaleras de aluminio, son más seguras para su uso cerca de cables eléctricos o en entornos eléctricos.
•  Escaleras de madera. Este tipo de escalera, muy usadas en tareas de reparación o pintura, son robustas y seguras para trabajos eléctricos gracias a la naturaleza aislante de la madera. Sin embargo, requieren de un mayor mantenimiento para prevenir daños por humedad o desgaste y son más pesadas que otras alternativas.

Estabilidad y seguridad

Los elementos de seguridad de la escalera son esenciales para garantizar la seguridad y estabilidad de los usuarios sobre la escalera, evitando posibles accidentes durante su uso. Por ello, a la hora de elegir una escalera, hay que verificar que incorporen conteras antideslizantes –que impiden que la escalera se desplace accidentalmente sobre la superficie durante su uso-, peldaños con relieves antideslizantes o sistemas de bloqueo de seguridad –para evitar que la escalera se pliegue involuntariamente-.

A través de esta guía, se puede escoger un equipo de trabajo que cumpla con los requisitos de seguridad, resistencia, durabilidad y adaptabilidad para cada trabajo. De esta manera, al considerar factores como el tipo de trabajo, el entorno o las características específicas de la escalera, se pueden tomar decisiones que garanticen la salud y seguridad de las personas durante el trabajo en altura.