En la Asociación Española de Fabricantes de Escaleras Portátiles (AFESPO) nos dedicamos a asegurar que las mejores prácticas en el uso de escaleras se comprendan y se apliquen en todo momento. La seguridad no es solo una prioridad; es una responsabilidad compartida por todos los que utilizan herramientas en su entorno laboral.
Puntos clave de la Norma EN 131-3:2018
- Uso adecuado
Las escaleras deben colocarse en superficies planas, firmes y niveladas. Según la EN 131-3:2018, hay que verificar la estabilidad de la escalera antes de cualquier uso. Un error común, como utilizarla en superficies irregulares o inclinadas, puede llevar a caídas y accidentes graves.
- Correcto despliegue y posicionamiento
Antes de utilizar una escalera de tijera, asegúrate de que esté completamente desplegada y que las articulaciones estén bloqueadas en su lugar. Un uso incorrecto, como puede ser no extenderla completamente, puede comprometer la seguridad del usuario y provocar una caída en altura.
- Capacidad de carga
Las escaleras tienen una capacidad máxima de carga que no debe ser superada. Sobrecargar una escalera, ya sea por exceso de peso del usuario o por equipos adicionales, incrementa significativamente el riesgo de accidentes.
- Mantenimiento y revisión
Un aspecto clave del mantenimiento seguro es la inspección regular de las escaleras, tal como lo indica la norma. Las escaleras deben ser revisadas periódicamente para detectar cualquier signo de desgaste, daño o piezas sueltas que puedan comprometer su integridad estructural.
El valor de la conformidad
Cumplir con la Norma EN 131-3:2018 no solo garantiza un entorno de trabajo más seguro, sino que también refleja el compromiso de una empresa con la salud y seguridad de sus empleados. Al seguir estas directrices, no solo estamos cumpliendo con los estándares europeos, sino que también contribuimos a reducir los riesgos asociados al uso de escaleras en el lugar de trabajo
Recordemos siempre que es fundamental seguir las instrucciones de manual de usuario.
La seguridad comienza con la preparación adecuada. Por ello, debemos seguir trabajando juntos para garantizar que las prácticas seguras sean la norma en todos los entornos laborales.